Los tiempos cambian, las sociedades avanzan y con ello la forma de ver a las empresas, tanto por sus dueños como por el público en general, desde los que consumen el producto y/o servicio hasta los que no.
Necesitas ir con las tendencias para que tu empresa sea una de las más exitosas y llamativas del mercado. La antigua fórmula de solamente generar ganancias ya no es atractiva, lo nuevo ahora es tener una empresa social.
La empresa social es un nuevo modelo de gestión. Los emprendedores sociales se encuentran dándole mayor protagonismo por el interés de generar modelos de negocio que ayuden a solucionar problemas que afectan a nuestra sociedad.
¿Qué es una empresa social?
Profundicemos un poco en el concepto de empresa social según expertos en este sector.
Uno de los principales actores en la materia es la Social Enterprise Alliance, ellos definen a la empresa social como “cualquier negocio de generación de ingresos o estrategia emprendida por una organización sin ánimo de lucro para generar ingresos para apoyar su misión caritativa”.
En Inglaterra, el departamento de Comercio e Innovación expresó que se trata de “un negocio con objetivos principalmente sociales, cuyos excedentes se reinvierten principalmente para este fin en el negocio o en la comunidad, en lugar de estar dirigida por la necesidad de maximizar los beneficios para los accionistas y propietarios”.
Muhammad Yunus, quien es un emprendedor social, banquero y economista condecorado con el Premio Nobel de la Paz por desarrollar el Banco Grameen, es el desarrollador de los conceptos de microcréditos y microfinanzas.
Él define a la empresa social como “una empresa sin pérdidas y sin dividendos diseñada para abordar un objetivo social”.
Estas son algunas características del emprendimiento social:
- Carácter participativo.
- Beneficia a comunidades. El esfuerzo se centra en el beneficio de las comunidades que se marquen como target principal
- Distribución de beneficios limitada.
- Igualdad de oportunidades. No discrimina por sexo, raza, discapacidades o experiencia.
- Se basa en la fuerza del trabajo más que en el capital.
- Promueve la innovación, tanto la económica como la social.
- Financiamiento mixto. El objetivo primordial del financiamiento es la autofinanciación, buscando reducir la dependencia económica.
[bctt tweet=”Una empresa social mejora las condiciones de vida de la comunidad por encima de cualquier beneficio económico propio.” vía=”no”]
Una empresa social es algo innovador. Se trata de una contribución a la sociedad; la búsqueda de soluciones a problemas sociales, pero siendo un negocio rentable.
Modelos de empresas sociales
Según Filipe Santos, Anne-Claire Pache y Christoph Birkholz existen cuatro modelos de empresa social:
1. Market Hybrids
Se trata de empresas sociales donde los clientes y las personas beneficiadas son el mismo colectivo. La creación del valor social es automática.
Es decir, las mismas personas que te van a comprar serán las beneficiadas de tu producto y/o servicio social.
Si decides colocar tu empresa social bajo este modelo, entonces la relación del resultado económico y el impacto social será reducido, esto se debe a que ambas cosas se encuentran alineadas.
2. Blended Hybrids
En este modelo sucede algo similar al anterior: tus clientes serán los beneficiarios, pero el valor social depende de ciertas acciones que involucran tanto a la empresa como a los clientes.
Si este es tu modelo escogido, ten en cuenta que no puedes olvidar el valor social y centrarte exclusivamente en tus productos y/o servicios.
Por ejemplo, en entidades microfinancieras el prestatario sería el propio beneficiario, pero para crear un impacto social positivo los créditos deben tener ciertas condiciones, así el cliente no siente una carga excesiva.
3. Bridging Hybrids
En este caso tu clientela no será la beneficiada. Aunque el impacto social sí va relacionado de manera minuciosa con la actividad empresarial, esto se debe a que se genera el impacto al mismo tiempo que se presta el servicio.
Para que tu sostenibilidad financiera no se vea en apuros, debes tener todos los procesos operativos integrados y alineados, es decir, la priorización de los clientes y el impacto en los beneficiarios debe tener el mismo nivel de importancia.
4. Coupling Hybrids
A diferencia del modelo anterior donde solamente había una cadena de valor, aquí existen dos conviviendo, una cadena para tus clientes y otra para los beneficiarios.
Este modelo de empresa social es un poco más complicado que los anteriores modelos e implica un reto: pudieran aparecer tensiones entre los objetivos económicos y los sociales, por eso es necesario tener todos los procesos integrados.
Las empresas sociales que suelen utilizar este modelo son las de integración laboral.
Además de estos cuatro modelos híbridos de empresas sociales en donde se combinan el aspecto social y el objetivo económico, también existen modelos basados en:
- El producto y/o servicio
Si ofreces productos y/o servicios que brindan solución a algún problema o aportan nuevas tecnologías a personas que puedan necesitarlas, o sencillamente reducen o sustituyen costes que alguien no se pueda permitir, entonces este es tu modelo.
La clave para que tengas una empresa social bajo este modelo es la política de precios y el trato que tengas con las personas beneficiadas.
- El trabajo
Si tu empresa tiene la capacidad de emplear a personas que puedan estar en riesgo de exclusión o que posean menores oportunidades, entonces este es tu modelo de empresa social.
Para lograr este emprendimiento social lo primero que necesitas es estudiar las posibilidades que hay de tener a todas esas personas integradas en tu equipo y qué tareas pueden desempeñar para aportar una ventaja.
Es la mejor manera de salir beneficiados todos: cuentas con empleados agradecidos por las oportunidades, mientras ayudas con el problema de la exclusión laboral y la persona puede aspirar a mejores condiciones en su vida.
- En la materia prima
Este modelo de empresa social dependerá exclusivamente de la materia prima que se tenga en mente utilizar para elaborar los productos.
Aunque vayas a introducir al mercado algo existente, podrás crearlo a partir de nueva materia prima que sorprenda al consumidor, pero siempre conservando la misma calidad.
Por ejemplo, productos orgánicos o elaborados con materiales no contaminantes o biodegradables.
Las empresas B
El que tengas una empresa B significa que tienes el compromiso de demostrar que tu empresa social puede ser un agente de cambio.
Te vas a diferenciar de otras compañías precisamente por ser una empresa que persigue un triple impacto:
- Propósito: Tendrás un impacto positivo.
- Responsabilidad: Tu objetivo primordial es el interés de tus trabajadores, de la comunidad y del medio ambiente.
- Transparencia: Tendrás que publicar anualmente un informe sobre el impacto social y ambiental. Tendrás que estar certificado por un organismo externo e independiente.
[bctt tweet=”Si tienes una empresa B entonces tienes una empresa social que posee la convicción de ser parte de las mejores empresas para el mundo.” vía=”no”]
“Estas empresas se rigen por altos estándares sociales, ambientales y de transparencia, considerando no solo los intereses financieros de sus accionistas, sino también otros intereses de largo plazo, tales como los empleados, los proveedores y los clientes, la comunidad a la que pertenecen y el medio ambiente”, explica Sistema B en su web, representante para Sudamérica de B Lab, certificador oficial.
Seguramente te estarás preguntando: ¿Necesito certificarme para ser una empresa social B?
Sí, necesitas certificar tu empresa social para que tenga el distintivo B. Esta certificación se aplica a la empresa, no a los productos y/o servicios que puedas generar.
Algunos de los beneficios de ser una empresa social B son:
- Se trata de empresas sociales muy atractivas para inversores de alto impacto
- Atraen talentos profesionales
- Permiten sumar nuevos clientes
- Generan interés en los consumidores
- Impulsar una empresa social rentable
Tu empresa será rentable en tanto a la creación de empleo estable y sostenible, así como con el fin ético y comprometido que tenga con su entorno.
Uno de los mayores beneficios de una empresa social es la competitividad que obtendrás por cuenta del compromiso social que tendrás al generar riqueza y empleo. Recuerda que vas a contribuir de manera casi directa con la sostenibilidad social. Esto es lo que te diferenciará de la competencia.
Tus clientes fieles y los potenciales van a preferir tus productos y/o servicios porque somos parte de una sociedad cada vez más consciente de los problemas locales. Por eso las personas van a preferir empresas que brinden una solución a dichos problemas.
[bctt tweet=”Tus consumidores estarán dispuestos a aceptar un sobrecoste de hasta el 10% para adquirir los productos “responsables” de tu empresa social.” vía=”no”]
Recuerda que crear una empresa social es exactamente igual que crear una tradicional, la única diferencia es el objetivo que tendrás como empresa, por lo tanto se administra de la misma manera.
Ejemplos de empresas sociales en México
Según el investigador Carlos Heredia, en México hay más de 40 mil empresas sociales, algunas de ellas son:
- Agropapaloapan: Produce alimentos a partir de las raíces y tubérculos tropicales, respetando al agricultor y su medio ambiente. Genera beneficios justos para todos los involucrados. Esta empresa social ya exporta a Estados Unidos y Canadá.
- Biodent: Esta empresa social es una clínica odontológica, posee alta tecnología y lleva sus servicios a personas de la base de la pirámide, es decir, personas de muy pocos recursos. Tiene un programa de cuidado y prevención de enfermedades bucales para niños dentro de las escuelas, donde se ofrecen servicios de diagnóstico de manera gratuita.
- GreenLand: Produce productos de limpieza para el hogar 100% biodegradables y certificados por instituciones mexicanas de alto prestigio. Cada uno de sus productos se realiza con materia prima derivada de ingredientes naturales y no generan un impacto negativo al medio ambiente. Sus productos ya se encuentran a la venta en las mayores cadenas de supermercados de México.
- Inventive Power: Esta empresa social se encarga de desarrollar tecnologías innovadoras para el uso eficiente de la energía. Busca maximizar la reducción de costos energéticos en el sector comercial e industrial.
- Podemos Progresar: Utiliza las ventajas de una microfinanciera para llevar productos y servicios a la base de la pirámide. Ofrece servicios de salud, educación, empoderamiento para mujeres y comunidades.
- Échale a tu casa: Es la empresa social mexicana considerada como una de las mejores empresas B del mundo. Tiene como objetivo mejorar las condiciones de vida de la población que no cuenta con una vivienda digna, todo esto mediante la autoconstrucción asistida con un enfoque ecológico.
Conclusión
Las empresas sociales son el presente y se podrán mantener gracias a una nueva generación de personas responsables con su entorno.
En tu empresa social debes tener siempre en mente las dos cadenas de valores, tus clientes y tus beneficiados, pero también las cadenas de valores de lo económico y lo social. Con esto en mente podrás lograr una estabilidad financiera en tu empresa social.
Recuerda que con una empresa social, los beneficios, la facturación, el aumento desmedido de las ventas pasan a ser un medio y no un fin.
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